La mañana del domingo 31 de enero traía aires salesianos. A las once y media de la mañana, muchos fueron los que acudieron a la tradicional misa dedicada al Santo. Justo después, las puertas de San Agustín se abrían para dejar salir al patrón de salesianos que, sobre un nuevo paso, recorrió algunas de las calles aledañas a la Parroquia.











Fotografías: Salva Porcel